miércoles, 27 de enero de 2010

NUESTRO NIÑO QUIERE SER NIÑA

NUESTRO NIÑO QUIERE SER NIÑA

La VIDA en el 2009 nos dejó grandes proyectos en puerta para realizar en este inicio de década, pero NINGUNO más importante como el que nos planteó 72 horas antes de que finalizara... ¡NUESTRO NIÑO QUIERE SER NIÑA! y evidentemente no nos preocupa el que quiera serlo, sino sobre todo cómo mi Chinita y yo podremos ayudarlo a hacerle frente a la vida tomando como guía nuestra propia experiencia.

Su padre, (el ex de mi Chinita) jamás será un apoyo, de hecho, mucho me temo que sea el primero en intentar hacer pomada su autoestima... su abuelos paternos y maternos muy lejos de sensibilizarse con el tema a través de este chiquito de tan solo 4 AÑOS, seguramente cargarán más el costal de culpas y amargura... en la escuela ni siquiera enfrentarán la posibilidad de mediar en caso de algún altercado a raíz de que mi "J" continue gritando a los 4 vientos ¡¡¡"QUIERO SER NIÑA"!!!.

Todo fue más evidente cuando los 7 de familia que somos, decidimos realizar unas compras en el supermercado 2 días antes del fin del año.
Nuestros niños, los 4 menores, (todos varones) querían estrenar platos decorativos para el almuerzo que tendríamos al llegar a casa. El mayor de nuestros hijos "JA" de 7 añitos marcó la pauta... él seleccionó el plato del HOMBRE ARAÑA, moción a la que se le unieron el par de gemelos de 3 añitos, "A" y "D"... estabamos en plena acción en la sección de vajillas, cuando nuestra adolecente "V" capta a "J" de apenas 4 añitos con la vista fija en un plato en específico, completamente diferente al de sus hermanos, tenía forma de corazón, estaba decorado en tonos rosa pastel y violeta y tenía al centro la imagen de las PRINCESITAS de Disney...
"V" de casi 14 años le preguntó si ese es el que quería y tímidamente, respondió que "sí", en automático ambas, Marinita y yo reaccionamos y le dijimos "por supuesto amor... ¡ése es el que te compraremos!"... de inmediato JA de un salto le respondió: "ese plato es ROSA es de niña, ¡tú no eres niña!" , entramos en acción y le hicimos ver que los COLORES son de TODOS.
"V" nuestra adolescente me vió a los ojos y me dijo "tenemos un problema en puerta y lo tenemos que resolver".

Esta fue la primera ocasión que enfrentamos el tema abiertamente.
Otras veces cuando "J" hablaba de que en un juego determinado el quería ser la "hija", la "sirenita" ó la "mamá" lo habíamos tomado a la ligera, pero creo que en cuanto se sintió libre y sin presiones su respuesta fue contundente: "QUIERO SER NIÑA".
Su afinidad con las niñas es inmediata, y sus expresiones verbales día a día muestran claras evidencias de rasgos femeninos.
Al salir de la tienda tenía su plato de Princesitas lo llevaba apretado contra su pecho en señal de lo mucho que le gustaba tenerlo, pero sobre todo con un temor enorme reflejado en sus ojitos por el comentario que gente que pasaba pudiera exprezarle.
Hablamos con él, le inyectamos valor y aceptó mostrar su plato... pasó la primera persona a su lado y, como era de esperarse, ni siquiera se molestaron en mirar a "J"...de inmediato se dibujó una gran sonrisa en su rostro y con los ojos que irradiaban alegria nos dijo" NO ME DIJO NADAAAAA!!!" y así siguió aconteciendo con todas las personas que transitaron a su lado. se sintió nuestro nene tan bien que llegó el momento en el que ya él mismo llamaba la atención de la gente diciendo "mira mi plato" y la gente sin caer en la cuenta de lo que les pedía nuestro niño, lo veían y tan sólo sonreían.

Cada vez que puede se hace de una sábana o toalla para amarrarla a la cintura y simular que es su vestido o su falda. El juego se desarrolla mientras él es "la hermana" o "la hija" y "A" es el papá, por ejemplo.
Incluso le ha pedido a su mamá que le compre vestidos, en específico para su cumpleaños. Disfraces de princesas, le fascina el rosa, las chicas superpoderosas, Barbie, etc. etc. Siempre que estas situaciones se dan, reforzamos que lo importante es el RESPETO que debe haber primero entre sus hermanos hacia él por diferir en algún gusto determinado.
Creo que "JA" (el mayor) se ha sensibilizado un poco al respecto. Incluso hemos hablado con él sobre la homosexualidad, sobre el significado de palabras despectivas como JOTO o MARICÓN que evidentemente hieren y agreden a la persona. Así que en cuanto "J" hace algún comentario sobre su gusto o interés en algo, estamos atentas a escuchar y observar la reacción de los demás, con el fin de fomentar claro, el respeto y la tolerancia. Además intentamos recalcarles en TODO momento que el AMOR y el RESPETO son lo más importante en una relación entre personas. Ya sea de amistad o de pareja, pero que para saber si se está actuando correctamente hay que SENTIR el BIEN dentro de un@ mism@.
Sí, tiene apenas 4 añitos , pero a su corta edad "J" se identifica plenamente con el género femenino y ante la carencia de prejuicios en su mentecita, lo externa con total naturalidad. Obvio es, que recibe mensajes negativos al respecto de sus hermanos en primera instancia, pero también escucha los típicos: "eso no se hace", "ESO es cosa de NIÑAS, usté es NIÑO, le TIENEN que gustar los carritos y las luchitas" por parte de nuestras respectivas familias políticas. Nuestro principal objetivo ahora es salvaguardar la autoestima de nuestro hijo, que fortalecido en el amor pueda enfrentarse con un mundo homofóbico, sabemos que tenemos mucha tarea por hacer, especialistas por visitar, ayudar a fortalecer la relación de FAMILIA PROTECTORA entre sus hermanos, además de que nosotras en específico, deberemos estar al tanto de su corazón para atajar cualquier tipo de ataque que haga mella en su alma...y si no fuera posible evitar la herida, estar a su lado para ayudarle a superarlo.
Sabemos que por la edad del nene, puede ser incluso el proceso de identidad de género que no necesariamente derive en homosexualidad, sin embrago, sentimos la urgente necesidad de protegerlo de cualquier forma de rechazo y agresión dadas las diferencias que día a día tiene con respecto al comportamiento de sus otros 3 hermanos que evidencían aún más la situación.
Sabemos que Diós y la Virgen están con nosotros pero siempre será agradecido ampliamente el "feed-back"...en fin, agradeceremos enormemente los comentarios o sugerencias que surjan al respecto.
Saludos muy afectuosos a tod@s y todos desde Aguascalientes, México.

María y Marina

8 comentarios:

  1. Hola chicas!

    Es cierto que su niño es aún muy pequeño para establecer si es real su "deseo" de ser niña o sólo es una diferenciación del generó y necesidad de exploración de los distintos roles...tal como nos los "marcan" de una forma muy radical y clara en nuestro país...y en su caso, en el Jardín de Niños, que me imagino es a donde ya acude...

    Si me lo permiten, creo que una acción buena a tomar, sería platicar con su educadora acerca del comportamiento del pequeño en clase, y también de cómo les está enseñando ella la diferencia de género y roles, pues puede ser que a él le guste ser niño...pero tiene gustos similares a las niñas...no que necesariamente quiera ser una niña... Sin embargo, si su maestra (la que todo lo sabe para él) les menciona que las niñas juegan a tal o cual cosa y los niños a carritos, etc., como se lo señalan sus familias respectivas...pues para el niño la decisión más fácil es "quiero ser niña"...porque de esa forma podrá jugar a lo que le gusta...

    Sea cual sea la verdad...poco a poco irá aflorando en él...y cierto, tendrán que armarse de mucho valor para defenderlo a él y a su misma familia, pues los malos comentarios estarán a la orden del día...

    Saludos!!! =)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. yo tambien me gustaria ser nena y usar chatitas y vestiditos

      Eliminar
    2. Es hermoso ser nina!!con vestiditos vaporosos y un mundo de puntillas,ponerse esas chatitas rosas y sentir el frescor del viento bajo la pollerita daria la mitad de mi vida por ser una nina de 10 anos por un dia.!!!.manuelcoop263@gmail.com

      Eliminar
  2. Chicas, con cuatro años es difícil determinarlo pero J. parece tener, a priori, una disforia de género. Y no es nada malo, ni pasa nada, si no fuera por la sociedad tan homo y transfóbica en la que vivimos.
    Opino que vuestra actitud es fundamental y por lo que cuentas lo estáis haciendo muy bien. En primer lugar reforzar su autoestima, que haga lo que le haga feliz y le apetezca, sin coacciones ni presiones.

    Y, por otro lado, infundir ese respeto y amor a sus hermanos, que rompan con esa dicotomía de los roles de género. Si al final J es una niña, vosotras y ellos seréis su mayor apoyo para enfrentarse a la vida, como lo hacéis vosotras como mujeres lesbianas, como lo hace cualquier que sea diferente a la mayoría. Pero que se enfrente desde la fortaleza, la libertad de ser quien quiera ser, dejándole claro cuando sea más mayor que no tiene ningún problema, es la sociedad quien lo tiene.
    Si no os importa, voy a pasar el link del blog a la responsable del área transexual de la Federación estatal de lesbianas, gays, transexuales y bisexuales de España para que os de su opinión.
    Un fuerte abrazo

    ResponderEliminar
  3. hes hermoso ser nina y usar bobachitas y corpinos y poder usar zapatos rosas y los tacos de mama e ir al colegio con polleritas y salir asi vestidita a comprar helados y chupar un pene a un nene de mi edad

    ResponderEliminar
  4. Yo quede yokeado ,,siempre quize ser niña!!

    ResponderEliminar
  5. Yo quede yokeado ,,siempre quize ser niña!!

    ResponderEliminar